CÓMO MEJORAR LA SEGURIDAD DE TU EMPRESA
GUÍA PRÁCTICA PARA AUMENTAR LA SEGURIDAD DE TU EMPRESA

Si te interesa mejorar la seguridad y el control de acceso en tu empresa, estás en el lugar indicado.
La seguridad no es un lujo, es una necesidad básica para proteger tu negocio, tus empleados y tus recursos.
En este artículo, podrás ver de forma clara y práctica cómo implementar medidas efectivas en cuatro sencillos pasos, adaptadas a las necesidades de tu empresa, sin complicaciones ni gastos innecesarios.
Estos consejos son útiles para cualquier tipo de negocio, desde oficinas y almacenes hasta pequeñas empresas o grandes instalaciones.
¿Estás listo para dar el primer paso hacia un entorno más seguro y controlado? ¡Sigue leyendo! .
Paso 1: Realiza un análisis de riesgos
Lo primero que debes hacer es un análisis de riesgos. Esto es fundamental para conocer la situación actual de tu empresa y las vulnerabilidades que puedas tener.
Los riesgos varían según la ubicación, el sector y las instalaciones de cada negocio. No es lo mismo tener una empresa en el centro de una ciudad que en una zona industrial, o enfrentarte a un incendio en una fábrica de pirotecnia frente a una empresa de recambios de coches.
Por eso es importante hacer un análisis de riesgos que te permita cuantificar los riesgos que debes tratar de mitigar, y que este análisis sea personalizado y aplicable a tu caso específico.
Hay muchos métodos disponibles, pero los más recomendables son el método Mosler y el método Cuantitativo Mixto.
En este enlace podrás acceder a una plantilla que te facilitará realizar este análisis. Al finalizar, obtendrás una tabla que clasifica cada riesgo según su gravedad, desde muy bajo hasta muy elevado.
Paso 2: Establece un presupuesto realista
La seguridad no debe considerarse un gasto, sino una inversión.
Pero para que esto sea así, es importante que el presupuesto se adecúe a tus necesidades y a los riesgos a los que te enfrentas.
Igual que no tiene sentido recortar en exceso en seguridad (te puede salir caro si tu empresa sufre un robo, incendio u otro incidente inesperado), tampoco lo tiene gastar en exceso, por ejemplo instalando 25 cámaras en una oficina pequeña o dotándola de sistemas excesivos que no se justifiquen por su tamaño o actividad.
Un presupuesto equilibrado y realista te permitirá proteger lo necesario sin gastar de más, adaptándote a las características y prioridades de tu empresa.
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Paso 3: Establece medidas de control y de mitigación
Utiliza un plano de tus instalaciones y clasifica las zonas por orden de importancia, desde las más sensibles, como almacenes u oficinas, hasta las menos críticas, como baños o cuartos de basura.
Vuelve al análisis de riesgos y empieza a trabajar en los puntos más críticos, aplicando mejoras en las zonas más importantes.
Hazte preguntas como:
- ¿Las puertas, muros y vallas dificultan suficientemente el acceso?
- ¿Las cámaras cubren todas las zonas sensibles?
- ¿El sistema de alarma tiene los detectores necesarios en cada área clave.
Es común encontrar sistemas de seguridad mal distribuidos que dejan vulnerabilidades importantes, como accesos por ventanas o techos que no están cubiertos. Es crucial solventar esto, porque de no hacerlo podrías estar tirando el dinero con unas medidas de seguridad totalmente inútiles.
Paso 4: Incorpora personal que controle los accesos
Un control de accesos bien gestionado puede marcar la diferencia en el día a día de tu empresa.
Dependiendo de tus necesidades y las funciones que deban hacer, este personal podrá ser un auxiliar de servicios o un vigilante de seguridad.
Aunque mucha gente los confunda, tienen diferencias: las funciones del auxiliar de servicios o controlador de accesos y las funciones del vigilante de seguridad son distintas.
Los auxiliares de servicios o controladores de accesos son una pieza clave para supervisar entradas y salidas, coordinar proveedores, registrar visitas y asegurarse de que todo funcione como debe funcionar.
Aunque pueden tener efecto disuasorio simplemente por estar y por controlar quién entra y quién sale de tu recinto, es importante destacar que los auxiliares no realizan funciones de seguridad privada como la vigilancia o la protección de bienes, porque estas están reguladas por la Ley 5/2014 del 4 de abril y reservadas al personal habilitado.
Su labor se centra en organizar, controlar y supervisar, ayudándote a mantener un entorno ordenado y eficiente.